Un programa de ordenador permite detectar, a través de un pestañeo, expresiones de sentimientos y necesidades.
Bruno, que tiene 25 años y lleva cuatro años trabajando con este sistema, ha participado en las IV Jornadas Iberoamericanas de Tecnologías de Apoyo a la Discapacidad para demostrar todo lo que es posible hacer con esta nueva tecnología y lo que significa para su futuro. «Comunicarme sin necesidad de intermediarios significó un paso enorme para conseguir mucha autonomía, permitiéndome incluso hablar en el Parlamento Europeo», ha explicado este joven a través de su ordenador.
El programa de ordenador le permite trabajar con procesadores de texto, hojas de cálculo o bases de datos y acceder a internet, además de permitirle expresarse y relacionarse con amigos y familiares, haciendo clic con un solo pestañeo. El responsable de las jornadas e investigador del Centro Superior de Investigaciones Científicas, Ramón Ceres, ha apuntado que los centros de ayuda cuentan con estos sistemas que «cada día se van abaratando más, y cada vez hay más opciones que funcionan a través de movimientos o gestos, por lo que esperamos que en el futuro cada persona pueda contar con uno de estos dispositivos en su casa». Además, algunos de estos programas también permiten a los usuarios conducir una silla de ruedas o controlar los diferentes dispositivos de una vivienda como encender o apagar la luz, cerrar las ventanas o conectar la televisión.
Bruno, que tiene una inteligencia normal y espera encontrar pronto un trabajo, ha podido formarse en colegios e institutos ordinarios gracias a la colaboración del Centro de Aprendizaje de Tareas de ASPACE (Confederación Española de Federaciones y Asociaciones de Atención a las Personas con Parálisis Cerebral y Afines) de Cantabria.
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